¿ El presidene está cansado?, por Irene Interra

¿De qué estará cansado el presidente?
¿Espera que le tengamos lástima?

Dice que está cansado porque no lo dejan gobernar. ¿No habíamos escuchado esto antes, a otro presidente liberacionista?

En realidad, parece que está cansado porque no lo dejan hacer todo cuanto él
-y solo él- considera importante, justo, necesario, apropiado. ¡Caramba!

¿Se habrá puesto a pensar el presidente en el cansancio de los ancianos que esperan, hace años, una merecida pensión?

¿Habrá pensado, en algún momento, en el cansancio de los que pasan horas y horas en una fila para recibir diez minutos de atención médica en la CCSS; en el cansancio de los que tienen necesidad de operarse y les dan turno para el 2010?

¿Se habrá detenido a meditar sobre el cansancio de los niños que esperan una beca que no llega, una comida que no aparece en la mesa de los comedores escolares porque el gobierno tiene retenidos los fondos?

¿Podrá siquiera el presidente imaginarse el cansancio de los que se quedaron esperando el cumplimiento de las promesas de campaña y nada, nada, nada se cumple?

¿Se habrá sentido, alguna vez, cansado por un juicio que lleva ocho años en los Tribunales y no termina?

¿Estuvo alguna vez cansado por esa carretera que necesita para llevar sus productos al mercado y nunca se empieza?

¿Comprenderá el cansancio de las jefas de hogar que, después de trabajar el día entero, llegan a la casa y no tienen más que agua dulce para darle a sus niños?

¿Podrá percibir, de alguna manera, el cansancio de los indigentes, a quienes el hambre, el frio, la soledad, la indolencia del prójimo y la falta de esperanza arrebatan todo rastro de dignidad humana?

Me parece que NO. Es terrible. Es indignante recibir esa queja del señor presidente. ¡Hay que oir! ¿Hasta cuándo?